La UCR bonaerense vivió un feriado del 9 de Julio lleno de conflictos. Fueron 24 horas de llamados, discusiones y peleas para lo que terminó siendo la conformación del frente “Somos Buenos Aires”. “La coalición nació ya con fugas a distintos lados”, adelantaron radicales a Infobae, en referencia a varios dirigentes que ya adelantaron que pelearán en sus distritos con armados alternativos o, incluso, con el “Frente La Libertad Avanza”. Los más pesimistas vaticinan que el partido centenario se encamina, no solo a una derrota electoral, sino también a una importante pérdida de representación parlamentaria. Los más optimistas celebran haber logrado el espacio “más amplio” posible.
Ayer por la tarde, mientras el PRO anunciaba su alianza con La Libertad Avanza y el peronismo proclamaba la unidad para el próximo 7 de septiembre, la UCR vivía horas de fuertes disputas internas. El rumor más fuerte fue la pelea que protagonizaron Emilio Monzó y Miguel Fernández, una de las autoridades del radicalismo bonaerense. “Vos sos una porquería de persona”, le habría gritado Monzó al ex intendente de Trenque Lauquen. ¿El motivo? El armado de las listas en la Cuarta Sección Electoral. Incluso, el ex presidente de la Cámara de Diputados deslizó enojado que se iría de vacaciones y no participaría de la disputa electoral.
Fernández, quien fue impulsado por Maximiliano Abad para la presidencia de la UCR bonaerense, ya había dejado trascender su malestar durante el fin de semana. Desde su entorno difundieron un mensaje con una fuerte aclaración: “El radicalismo quiere hacer valer su peso y encabezar las listas al menos en las secciones que es predominante con los intendentes y el territorio. No vamos a construir un espacio de centro para que todos vengan a querer encabezar con la estructura del radicalismo”.
Ese mensaje fue difundido el sábado por la noche, en la previa a lo que sería la reunión de la Convención de Contingencia, encabezada por Pablo Domenichini, para acordar la estrategia electoral. El espacio de Evolución fue el principal impulsor de la construcción de un espacio de centro, “alejado de los extremos” que hoy representan La Libertad Avanza y el kirchnerismo, objetivo que finalmente se cumplió anoche. Sin embargo, a las pocas horas se conocieron profundas diferencias entre los propios radicales y hasta fugas de dirigentes municipales.
En concreto, el sector de Abad no firmó anoche el acta para inscribirse en la alianza “Somos Buenos Aires”. El legislador Diego Garciarena había sido el designado para encabezar esas negociaciones. Según trascendió, durante las conversaciones para avanzar en la alianza, se habría levantado disconforme con la estrategia planteada. En ese momento esperó salir acompañado de Miguel Fernández, quien también era aliado de Abad, pero no sucedió. Tanto el ex intendente de Trenque Lauquen como el senador nacional arrastraban diferencias desde hace algunos meses, y anoche el vínculo terminó de romperse.
“Nosotros apoyábamos una alianza alejada de los extremos pero competitiva. Este frente tiene mucha preponderancia peronista y tenemos dudas de que pueda ser competitivo”, dicen en el sector de Abad que anoche no firmó el acuerdo. De hecho, dejaron trascender que el radicalismo de Junín, Zárate y Pergamino jugará por fuera y que, incluso, podrían aliarse con el PRO y La Libertad Avanza. Además, la intendenta de Adolfo González Chaves, Lucia Gómez, ya anunció su salida de la UCR y conformará una alianza con otros espacios aliados.
En Evolución, que en territorio bonaerense está liderado por Domenichini, desmienten algún tipo de fuga en Junín y le bajan el tono al resto de las disidencias. En paralelo, muestran sorpresa por la decisión de Abad de mantener silencio y despegarse de la coalición de centro. “Él es un hombre de partido”, lo describen y tratan de buscarle explicaciones a los pasos que deberá seguir para contener a sus legisladores.
Los referenciados con Abad tienen un diagnóstico catastrófico para lo que será la elección bonaerense de la mano de la alianza “Somos Buenos Aires”: creen que la UCR perderá todos los concejales en el conurbano bonaerense y que se perderá una importante representación legislativa. “No se va a llegar a los pisos necesarios”, sentenciaron. También protestan por el acuerdo que selló Domenichini. Según sus cálculos, el acuerdo implicaría que la UCR solo encabezará en la Cuarta y la Octava Sección. El resto quedaría repartido entre el peronismo, el GEN y la Coalición Cívica. En Evolución, en cambio, retrucan: “Es mentira. El radicalismo va a encabezar al menos en cuatro secciones”.
Un capítulo aparte merece la difusión de las fotos del frente por separado. La UCR mandó un comunicado con una imagen que muestra en el centro de la escena a Domenichini y Fernández, acompañados por el GEN y la Coalición Cívica. Por otro lado, trascendió una del peronismo disidente con Facundo Manes. “Joaquín de la Torre desapareció de la escena”, dicen los radicales molestos con el acuerdo quienes vaticinan que en los próximos diez días, en el camino al cierre de las candidaturas, habrá más fugas. Mientras tanto, el sector de Abad tendrá este mediodía una reunión para establecer los pasos a seguir para contener a los suyos.